Por Uriel
González :: @urielgonzalez
A principios del siglo XX en la colonia británica de Hong
Kong nació John Malcolm Thorpe Fleming Churchill, a quien la historia de su país
haría conocido como “Mad Jack” (“Loco Jack”).
Este apodo le fue dado por los soldados con los que hizo
carrera en el Ejercito del Reino Unido, donde era conocido por su espíritu aventurero
y sus costumbres extrañas, así “Mad Jack” Churchill conoció los confines del Imperio Británico y tuvo todo tipo de trabajos: Fue modelo, surfista, y editor de
diarios en las colonias africanas, donde también practicó motociclismo, atletismo
y puntería con flechas hasta convertirse en un talentoso arquero.
Al llegar la Segunda Guerra Mundial “Mad Jack” fue llamado para la defensa ante una posible invasión nazi, y durante un desembarco de entrenamiento en Escocia, se lanzo del bote de transporte gritando…con una
espada.
Cuando sus camaradas de armas le preguntaron porque llevaba eso,
el soldado “Mad Jack” dijo la frase que lo haría famoso:
"Any officer who goes into action without his sword, is improperly dressed."
(Un oficial que se presenta en la lucha sin su espada,
no está apropiadamente
vestido)
Pero “Mad Jack” no llevaba armas antiguas como un coleccionista,
era un guerrero feroz y las usó contra el enemigo en batalla, los alemanes
supieron de su puntería con arco y los brutales golpes de su espada Claymore.
En una guerra en la que se peleó con submarinos, tanques, aviones y
todo tipo de armas mecánicas, las costumbres de caballero medieval del oficial
Churchill no pasaron desapercibidas, las tropas fascistas y sus propios
compatriotas quedaban perplejos en cada batalla en la que este
oficial corría hacia el enemigo levantando su espada, o al oírlo tocar su gaita
cada vez que llegaba a la conquista de alguna aldea europea.
Para bien o para mal la guerra fue su pasión, conquistó pueblos
en Francia, Noruega y Yugoslavia, tomo por sorpresa al enemigo en las islas del Adriático
y fue capturado por nazis en Austria, incendió un avión donde lo llevaban
prisionero a Berlín creyendo que era un familiar del Primer Ministro Churchill,
y caminó solo por 150 kilómetros en Italia luego de escapar de un campo de
concentración.
Para cuando la guerra había acabado en Europa pidió rápidamente
ser trasladado para combatir contra Japón en Asia, pero al llegar a India las
bombas atómicas habían puesto termino a la Segunda Guerra Mundial y “Mad Jack”
se quedó sin más batallas.
Mientras el mundo recuperaba la paz, el se quejó contra sus
aliados:
"If it wasn't for those damn Yanks, we could have kept the war going another 10 years!"
(Si no fuera por los malditos Yankees, ¡Podríamos haber mantenido esta guerra por otros 10 años más!)
Pudo seguir luchando brevemente y viviendo algunas aventuras
en Burma, Australia y Palestina, para luego retirarse con tres condecoraciones
al valor, su arco, sus flechas, la gaita y la espada, a la apacible vida de
Surrey, en el sur de Inglaterra.
“Mad Jack” murió en los 90s, por lo que llegó a ver la posibilidad
de que el mundo se destruyera por completo apretando un botón, aunque quizás nunca lo entendió.
Porque para derrotar a Hitler y Mussolini, al Teniente
Coronel John Fleming Churchill le bastaba con arco y flechas, una gaita, y su
espada.
BIBLIOGRAFIA
Young,
Peter, Commando, Nueva York
(1969)
Robert Barr
Smith, Fighting Jack Churchill survived a
wartime odyssey beyond compare, WWII History Magazine, (2005)